El lanzamiento sorpresa, o "Shadow-Drop", de The Elder Scrolls IV: Oblivion Remastered el 22 de abril envió olas a través de la comunidad de juegos, pero arrojó una larga sombra sobre los desarrolladores independientes que habían planeado lanzar sus juegos el mismo día. Jonas Antonsson, cofundador de la editorial independiente Raw Fury, exp